lunes, 20 de abril de 2015

Era perfecto, demasiado.

Parece que me quedo sin aire, pero tengo que seguir avanzando, los latidos de mi corazón me advierten que quizás me este equivocando, otra vez, intento cojer aire pero a mis pulmones no les apetece trabajar, solo faltan unos pocos pasos, ya casi puedo verle, un pequeño pájaro se cruza en mi camino, volando tranquilamente, como si el tiempo no se hubiera detenido para el resto del mundo, solo para mi. Me siento pérdida y un poco mareada, nerviosa, algo esta a punto de estallar en mi interior. Un paso más. Ya puedo verle, esta ahí, sentado en nuestro banco, sonrio solo con la ilusión de que me este esperando, pero en el fondo se que no es verdad, solo intercambiamos un par de palabras antes, cuando nos cruzadas por la calle, siempre cerca de ese banco y por eso es nuestro banco. Parece que las fuerzas han vuelto y sigo caminando, pensando maneras de conversar con el, decir "que casualidad encontrarte" aunque no haya sido casualidad, pero el jamás podrá saber que yo se a que hora termina de entrenar y que al terminar va siempre al mismo sitio a descansar, lo supe sin querer, mientras hacia los mandados lo vi un día, y luego otro, y otro más y espere al día perfecto para ir a saludarle, volví a mirarle, parecía tan tranquilo allí sentado, y yo casi caminaba sin rozar el suelo, casi volando, entonces lo vi levantarse, sonreír, y una chica que yo no conocía saltar a sus brazos y besarle, mi mundo empezó a derrumbarse, tan patética, tan absurda, tan estúpida... En el fondo ya lo sabía, era demasiado bueno, en el fondo, pero no quería reconocerlo... Me fui a casa, ya no tenía nada que hacer.

jueves, 16 de abril de 2015

Muerte?

Quien es juez y quien verdugo? Quien es mentiroso y quien dice la verdad?
Parece que la vida va pasando para todos, y con cada año ganan más miedo de la muerte, como un agujero que se estuviera deshilachando en su interior. Pero a la muerte no hay que tenerle miedo, todos piensan que es el final pero quizás sea el principio, como cuando terminas una libreta y comienzas una nueva en la que poco a poco vas escribiendo y página a página la vas llenando de datos, dibujos o frases, a veces el folio en blanco da miedo, es como un gran agujero sin fin que puede absorbente si te acercas demasiado, así es la muerte, un folio en blanco, por eso la tememos, pero en el fondo la adoramos porque si lo pensamos, no es la muerte la que nos persigue, somos nosotros los que poco a poco nos lanzamos a sus brazos.

Eternidade (Relato en gallego)

Inda agardo por ti. Poderan pasar meses, anos e séculos, pero sempre agardarei por ti. Non me importa o tarde que chegues, mentres chegues. Non son das que miden o tempo, nunca o fun, e nunca o serei. Sigote agardando, sentada na butaca da cociña, mirando o reloxo, impaciente pola túa chegada. Soño co día que chegues, as veces, pensó que estas aquí, que por fin chegaches, pero só e un espexismo, un espexismo creado pola miña imaxinación, que te acarda impaciente. Ao mellor, si son das que miden o tempo, ao mellor non. Sei que levo moito tempo, sentada, esperándote, pero nunca das chegado. Porque non chegas? Acaso perdecheste? Quero irte buscar, pero ao mellor chegas cando eu este fóra, buscándote. O reloxo, só miro o reloxo, sintindo as horas pasar. Dúas, tres, catro, cantas horas levo aquí sentada? 
Fixome no reloxo, tenme algo estrano, pero non dou sabido que. Entón, doume de conta, no reloxo non pasan as horas, as agullas están quedas. Non! Non están quedas, as agullas do reloxo, non están. Onde están? Quen as sacou? Porque levo horas mirando o reloxo e non me din de conta? Acaso o tempo estame gastando una broma? Xa me fartin de mirar ao reloxo sen agullas, sentindo o tempo pasar, non o soporto mais! Pero, non podo deixar de miralo, non podo levantarme, levo tanto tempo na butaca que xa non sei moverme, xa non sei nada, como me chamo? Cantos anos teño? Estou asustada, ou debería dicir asustado? Como puiden acabar así? Mirando o tempo pasar, sen poder facer nada, como fixen para acabar así? Agardando, por ti, que nunca viras